Miércoles, 16 de marzo de 2022

(Guayaquil, Guayas).- En el feriado de Semana Santa en Ecuador, el turismo religioso se incrementa al ser una actividad principalmente motivada por la fe. Desde la época colonial republicana hasta la actualidad, los creyentes han encontrado en las iglesias y catedrales de nuestro país un refugio para sus plegarias y también un espacio para contemplar la belleza arquitectónica.

Estas inmensas construcciones llaman la atención por sus diseños góticos romanos, obras de arte y vitrales; además, por sus leyendas o actos de fe, que giran en torno a su comunidad. Estas bondades han hecho de ella un atractivo turístico para propios y extraños.

En Guayaquil, al recorrer las iglesias encontramos la Catedral Metropolitana, conocida de forma oficial como la Catedral de San Pedro. Esta edificación fue construida en 1547 junto a la Casa de Cabildo y la Plaza de Armas. Su edificación original era de madera,  pero en 1692, un incendio la destruyó. Entre 1924 y 1937 fue refaccionada con materiales más duraderos, manteniendo su estilo colonial.

La Catedral, también es llamada la Matriz de los milagros, donde a diario llegan decenas de fieles católicos a encender una vela y rezar una plegaria en sus bancas para sellar el pacto de fe.

Continuando con el recorrido por la ciudad del Puerto se llega a la Basílica de la Merced, ubicada en la calle Víctor Manuel Rendón, entre Córdova y Pedro Carbo. Este templo inspirado en la escuela neo gótica – bizantina fue construido en 1927.  En la actualidad mantiene elementos góticos que representan la arquitectura medieval. Su nombre honra a la Virgen de la Merced.

La iglesia de San Francisco conocida como Nuestra Señora de los Ángeles, es otra joya de la urbe porteña. Fue creada en su totalidad con madera en 1702, pero fue destruida varias veces por incendios. En 1920 se realizaron trabajos de restauración, con materiales más fuertes y respetando detalles de su edificación original. Su torre principal es el mayor distintivo y en su interior se pueden apreciar obras de arte como la escultura del Descendimiento de la Cruz de Alvarado y Figueroa. Además, posee vitrales y conjuntos escultóricos de la época colonial que le dan un realce a la decoración del templo.

Invitamos a todos a dar un recorrido por estas joyas arquitectónicas de nuestro país, que están llenas de testimonios, milagros y escenarios fascinantes para contemplar. Serán el plan perfecto para vivir con intensidad la #SemanaSanta en Ecuador.