El primer Mercado Gastronómico de la costa ecuatoriana está en Portoviejo
Boletín N° 072
21 de octubre de 2024
En una ceremonia llena de alegría y con el sabor propio de la gastronomía manabita, el Mercado Plaza Central de la ciudad de Portoviejo fue reconocido por el Ministerio de Turismo como el primer Mercado Gastronómico de costa de Ecuador.
El ministro de Turismo, Mateo Estrella, entregó esta declaratoria señalando que la distinción se logró gracias a los más de 60 locales de comida que funcionan en Plaza Central, donde se encuentran comidas deliciosas y tradicionales, sumado a la atención de su gente durante las 24 horas y la sanidad del entorno.
El 16 de abril del 2016, Manabí sufrió un terremoto de magnitud 7.8 que destruyó un gran porcentaje de infraestructuras, siendo una de ellas el Mercado N° 1; pero bajo el amparo de la Ley de Solidaridad se construyó Plaza Central de Portoviejo, inaugurada el 17 de octubre del 2021, con una moderna e inclusiva infraestructura con rampas de acceso, escaleras eléctricas, ascensores guardería, oficinas administrativas, parqueaderos para 200 vehículos. El mercado provee seguridad, movilidad, logística y facilidad de carga y descarga.
Dennisse Guillen, gerente de Porto Comercio, resaltó que gracias al trabajo conjunto se consiguen grandes logros, y que la certificación recibida es una puerta que se abre al turismo nacional e internacional, y reconoce la grandeza de las costumbres y el talento de su gente.
Juvenal Saltos, director de turismo de Gobierno Municipal de Portoviejo, invitó a reconocer el esfuerzo de todos quienes laboran en Plaza Central. “Este logro resalta la gastronomía ecuatoriana y reafirma el compromiso de convertir a Portoviejo, en un destino gastronómico de renombre” manifestó.
Karol Pancha, dueña del comedor Rosita, considera que Plaza Central, es más que un mercado, este lugar representa la cultura manabita a través de su gastronomía.
La selección de este mercado se basó en varios criterios, incluyendo su valor histórico y cultural para la comunidad, su proximidad a servicios turísticos, la disponibilidad de señalización y servicios básicos, y estándares gastronómicos como las Buenas Prácticas de Manufactura y capacitación en manipulación de alimentos.