(Riobamba, Chimborazo. 28.12.2018) Ecuador inicia el 2019 con una fiesta patrimonial «la Diablada de Píllaro». Del 01 al 06 de enero vive una celebración con cientos de diablos y personajes representativos, quienes danzan al compás de las bandas de pueblo en las calles del cantón Píllaro ubicado en Tungurahua. Participa en una festividad llena de color y conoce las expresiones culturales únicas del país.

La celebración fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial del Ecuador, el 29 de diciembre del 2008. Se originó en los sectores rurales de Píllaro, según relatos de los pobladores fueron los jóvenes de la parroquia Marcos Espinel y el barrio Tunguipamba quienes salían en la noche a dar serenatas, causando malestar y celos en los hermanos de las mujeres que recibian los cortejos. Así, los familiares se disfrazaban con sábanas blancas y caretas con cachos de venado provocando ruidos tétricos con un cabresto seco para infundir miedo a los jóvenes visitantes.

Desde ese momento, la Diablada de Píllaro se ha convertido en una tradición que anualmente fortalece la expresión cultural andina. En la fiesta participarán 13 comunidades denominadas ‘partidas’ que se conforman de 1.000 a 2.000 personas entre diablos y danzantes por cada grupo. Además, se contará con una partida especial conformada por niños y niñas de la localidad.

El recorrido inicia por la mañana y se extiende hasta la noche. Cada comunidad emprende su caminata por la calle Rocafuerte hasta llegar al Parque Central. El ritual continua con los denominados “descansos”, que permite a los diablos alojarse en casas muy cercanas de los cabecillas del grupo para organizar concursos y premiar al mejor bailarín y a la mejor careta. En la noche nuevamente bailan por el mismo trayecto llenando las calles de música, cantos, sonidos y bailes muy llamativos.

Durante la caminata, los diablos son acompañados por: las ‘parejas en línea’, personajes que representan a los patronos opresores y por las ‘guarichas’, hombres disfrazados de mujeres de dudosa reputación que brindan licor a los asistentes y llevan un muñeco, el cual simboliza a su hijo. Los ‘capariches’ aperturan el desfile con bailes y barriendo las calles con una escoba hecha con plantas secas.

En los últimos años, la festividad en Píllaro recibe a más de 60.000 turistas nacionales y extranjeros, en  los seis días de fiesta. La actividad beneficia al sector hotelero, artesanal, comercial y gastronómico del cantón que ofrecen una diversificada y variada oferta turística para los viajeros.

Además de las festividades tradicionales se puede conocer y recorrer por los encantos naturales que ofrece la zona andina del centro del país como: lagunas, cascadas, vegetación y fauna que alberga el Parque Nacional Llanganates. Una opción más es disfrutar de una excelente panorámica desde los volcanes Cotopaxi, Tungurahua, Illiniza y Chimborazo.

Inicia el 2019 recorriendo el país de los cuatro mundos. Vive una experiencia única en Píllaro. Planifica tu viajes y disfruta de una nueva experiencia en una fiesta patrimonial que resalta la cultura ecuatoriana.  El Ministerio de Turismo te invita a contar tu experiencia de viaje con el hashtag #DiabladaDePillaro.