Lunes, 6 de septiembre de 2021

(Portoviejo, Manabí).– Cada día la portovejense Joselyn Macías espera que sean las 17h00 para salir en su bicicleta de montaña.  Se coloca su indumentaria, su casco protector y sale. En ocasiones toma la ruta hacia la playa de Crucita y en otras prefiere el inmenso cerro Hojas Jaboncillo, en ambas el aroma de la tarde le genera alegría y serenidad.

Ella casi siempre pedalea con otros amigos y amigas. Los recorridos son muy divertidos, Portoviejo tiene rutas fabulosas incluso pistas naturales como La Tomatera que es un cerro en el norte de Portoviejo que completa una ruta de 32 kilómetros. Los desniveles del terreno, las curvas, la tierra suelta en ocasiones y la naturaleza, la convierten en un escenario extremo para practicar este deporte. Ciclistas de toda la provincia llegan a este sitio.

Su utilidad creció tanto que el Gobierno Municipal local decidió declararlo como “Espacio de conservación ambiental, deportivo y punto de encuentro familiar. A la semana llegan unas 1.200 personas a dar rienda suelta a su actividad.

Cerro de Hojas Jaboncillo, ubicado en la parroquia Jaboncillo, en cambio tiene más que ver con la magia y las historias ancestrales. Se constituye como el sitio más alto de la ciudad, lugar donde vivieron los Manta y a donde ahora acuden los ciclistas, sobre todo al caer la tarde para completar el mismo recorrido que hicieron sus ancestros.

El ciclismo es una actividad que creció notablemente en Portoviejo durante el contexto de la pandemia del coronavirus. Según Antonio Medranda, integrante de clubes de ciclismo, el aumento fue de un 400 por ciento, al punto que ahora son miles de personas las que deciden salir a pasear ya sea por salud, diversión o por disfruta de los cautivadores paisajes de este rincón de la provincia de Manabí.

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