Bosque La Perla, una joya de Santo Domingo de los Tsáchilas

(La Concordia, Santo Domino de los Tsáchilas. 24-08-2020)  A 40 kilómetros de Santo Domingo de los Colorados, en la vía La Concordia-Esmeralda, se encuentra un tesoro natural de nuestro bello Ecuador, el Bosque Protector La Perla, uno de los últimos remanentes de Bosque Húmedo Tropical del Chocó.

Perteneciente al cantón La Concordia de Santo Domingo de los Tsáchilas, este sitio es idóneo para el turismo ecológico, cuenta con 650 hectáreas, de las cuales 286 son selva, y con un clima muy agradable donde la temperatura promedio oscila entre los 18º y 26º C.

Al visitar el bosque tendrás la oportunidad de estar en pleno contacto con la naturaleza. Observarás ceibos con 700 años de vida y hasta 42 metros de altura, y otras especies como roble, guayacán, laurel y más. La vida silvestre es punto de interés, se estima que en este lugar habitan 250 especies de aves como pájaros carpinteros, tucanes, aras y garzas bueyeras.

A 40 kilómetros de Santo Domingo de los Colorados, en la vía La Concordia-Esmeralda, se encuentra un tesoro natural de nuestro bello Ecuador, el Bosque Protector La Perla. #MeQuedoEnEcuador

Varios ornitólogos y ambientalistas visitan el Centro de Educación e Interpretación Ambiental de este bosque protector para conocer de cerca la vida de las especies de flora y fauna del lugar.

La conservación del bosque La Perla fue una prioridad para Suzanne Sheppard, la dueña de la hacienda donde está el bosque, ella falleció en 2007, pero dejó un legado de conservación que se mantiene con la institución que creó en el 2004. Todas las actividades que se realizan en el bosque han sido implementadas con el fin de financiar el Centro de Rescate de Vida Silvestre y las múltiples actividades de mantenimiento de la reserva.

Entre las actividades más requeridas se encuentran las caminatas educativas, que buscan generar consciencia sobre el cuidado del medio ambiental, enfocado en temas de importancia mundial como el cambio climático y otros que son detallados en la caminata que dura de tres a cuatro horas.

Caminar por el lugar es observar plataformas arbóreas con estructuras metálicas octogonales, no invasivas, sujetadas por cables a los árboles y ubicadas dentro de la selva a 12 y 24 metros de altura, una a la especie arbórea bombacacea, que tiene 55 m. de altura y 875 años de edad. Desde este punto aprecia los estratos dentro de un bosque y el majestuoso e imponente árbol, uno de los más altos.

Otra opción para los aventureros es el ascenso vertical, un deporte extremo que pone a prueba la coordinación, resistencia y destreza en las alturas, al subir a través de una soga semi-estática y todas las medidas de seguridad.

Por ahora nos toca esperar para seguir disfrutando de esta joya natural que encierra múltiples actividades turísticas y de conservación. Pronto retomaremos los viajes y mi desición es #MeQuedoEnEcuador para  descubrir más de encantos naturales.