21 de marzo, Fiesta del Equinoccio: La celebración del maíz
Quito (20-03-2015).- Este 21 de marzo se celebra la Fiesta del Equinoccio de invierno, estrechamente relacionada con el ciclo agrícola andino en el que el maíz es el principal elemento, pues constituye un símbolo de la fertilidad. El maíz es el componente vital dentro de la cosmovisión indígena y esta fecha marca el inicio de un nuevo año. Es decir, el tiempo de volver a nacer y recrear.
Para celebrar esta fiesta ancestral el Gobierno de la provincia de Pichincha y el Gobierno Municipal de Pedro Moncayo y otras organizaciones invitan a los ciudadanos nacionales y extranjeros a ser parte de la celebración del encendido y la repartición del Mushuk Nina (Fuego Nuevo), esta evento tendrá lugar en el Parque Arqueológico y de Investigación Científica Cochasquí.
La fiesta inicia hoy viernes 12:00 con el encendido del Fuego Nuevo (Mushuk Nina).
Sábado 21, a las 10:00 con el festival de comida de granos tiernos en la Comuna de Cochasquí, y la inauguración de la Casa de Saberes y Conocimientos Ancestrales, a las 17:00 se realizará la Vigilia del Fuego Nuevo en el área de Camping de Cochasquí.
Domingo 22, a las 10:15 se tiene previsto el reparto del Fuego Nuevo, la toma simbólica de la Plaza por parte de las comunidades de Pedro Moncayo. Ceremonia de reparto del Mushuk Nina. Exposición de artesanías, pampamesa, curas y Limpias.
A las 12 del día de esta fecha no hay sombra porque los rayos solares caen perpendicularmente, lo que era aprovechado para hacer éstos choquen con un metal precioso como el oro y producir el MUSHUK NINA (fuego nuevo), las mujeres preparan una mezcla de pétalos de flores silvestres y agua de vertientes conocidas por sus dotes de curación y energía positiva, la que reposa en el patio de la casa para el juego ceremonial del TUMARINA.
Cuentan los “taitas antiguos” que en estas fechas se apagaban todos los fogones. Durante tres días era el tiempo de limpieza y reflexión de las comunidades. Cada persona y familia hacía un proceso de “purificación” física y espiritual. La noche anterior al 21 de marzo permanecían en vigilia, reunidos en asambleas (tantanakuy). El día del solsticio, desde la salida de los primeros rayos del sol, se colocaba un cuenco metálico y, en su interior, trozos de madera del entorno. El “templos cilíndricos” se esperaba el equinoccio para, en un ritual especial, apropiarse del fuego nuevo (Mushuc Nina) donde el fuego sagrado era encendido por el sabio más anciano de la comunicad y pasaba a manos de los jóvenes quienes repartían el fuego nuevo a sus vecinos y demás pobladores.
Con esta ceremonia ancestral se evidencia la sabiduría y experiencia de los pueblos andinos preincaicos en geometría, astrología y matemática para beneficio de las cosechas. El 21 de marzo en el solsticio de invierno, es la época en la que aparecen los primeros granos tiernos y los demás cultivos están en floración.
La celebración del ritual del Día del Equinoccio tiene como propósito difundir, crear y mantener un espacio apropiado para que las comunidades y movimientos culturales muestren y compartan su riqueza cultural expresada a través del arte, formas de organización patrimonial tangible e intangible, en un ambiente de solidaridad y aporte al fortalecimiento de sus relaciones de interculturalidad y desarrollo local.
En esta fecha y particularmente sobre la franja ecuatorial, los rayos solares caen perpendicularmente, dando lugar al fenómeno tan comentado del “hombre sin sombra” o “día del sol recto”, fecha de inicio del calendario para nuestros pueblos andinos.
El Equinoccio de Primavera es el periodo en el cual los cuatro elementos- Aire, Fuego, Agua, Tierra- se encuentran en la fase de mayor luminosidad: el Aire está alegre por los vientos suaves, el Fuego de Aries empieza su obra de transformación, las lluvias de primavera quitan la sed y preparan los campos y la Tierra está más exuberante que nunca.
En el calendario Andino estamos en tiempo de PAWKAR RAYMI (marzo), donde la vida recrea nuevas y ancestrales vitalidades, renace la ALLPA MAMA y las comunidades se juntan para restablecer su relación con la PACHAMAMA para terminar y recomenzar la construcción interminable de nuestra interculturalidad.
FRL.